viernes, junio 30, 2006

Alicia

"Puedes expulsarme al País de las Maravillas si así lo prefieres, en vez de luchar te rindes y me dejas sola en esta batalla eterna de soledad y miseria interior...", y así fue como Alicia desapareció de la faz de la tierra y jamás se supo de ella, se dice que realmente vive en el País de las Maravillas, aunque éste no sea tal y como nosotros lo conocemos, para los que viven en él no es maravilla, es pesadilla e incomprensión...
Andrés vivió toda la vida con la carga de saber que Alicia ya no volvería y que sólo él podía hacerla regresar, su tacto divino se tornó maldito y murió borracho, durmiendo con los peces, que lo acojieron con resignación en el fondo de la bahía, la misma bahía donde solían sentarse a media tarde para ver fundirse juntos los barcos y el crepúsculo.
Alicia nunca conoció más amor que el interés, aprendió a moverse ya de bien chica con las necesidades de la sociedad, si querían ver bailar a una graciosa niñita vestida de flamenca, debían tirar unas monedas primero, si años después, querían sexo frío sin amor con aquella joven de pechos firmes y sonrisa de ángel, debían tirar un buen fajo de billetes primero; Alicia tenía veneno en la piel, Andrés la tocó y se quedó con él, enfermaron juntos y murieron solos: uno en el fondo del mar, la otra en un sanatorio llamado "País de las Maravillas", vivieron los dos a su modo y por separado, una auténtica pesadilla de amor/horror/dolor y soledad...

A todos los que caminan solos por la vida...

lunes, junio 12, 2006

Derivas II

Ha vuelto a amanecer y el alba me sorprendió lidiando contra las agujas del reloj, hoy reinarán unas enormes gafas de sol en mi cara, ocultarán los signos de victoria y soledad. Victoria porque gané la batalla a los horarios esclavos que dominan nuestras vidas, soledad porque nadie comprende nuestra batalla, la eterna lucha, somos seres de la noche, somos seres de día también...
Mientras conduzco miro por la ventana, la discontínua línea blanca se torna contínua a medida que avanza la aguja del cuentaquilómetros, con cada centímetro hay una historia, seguro, ¿existe similitud entre centímetro e instante? Podría ser, todo depende del momento y la ocasión.
Avanzamos inexorablemente a la deriva, la monotonía del pueblo, del hombre de a pie, esa es la tónica dominante en estos días grises sin fin, grises e infinitos como el horizonte, aunque recorra quilómetros y quilómetros, esa lejana y delgada línea nunca termina ni terminará, y aunque cerremos los ojos, allí seguirá, eterna e inamovible, invitándonos al desespero de no poder alcanzarla jamás, pero convidándonos a soñar para que la lucha continúe y podamos pensar que todo cuanto deseamos y anhelamos se encuentra justo detrás del horizonte que siempre viene pero nunca llega, como el mañana...
Feliz viaje a la deriva, marinero

martes, junio 06, 2006

El código da vinci

me han pasado este recorte, como lo he encontrado muy bueno y acertado con los tiempos que corren, he decidido colgarlo aquí, lo pongo en rojo para que se diferencie puesto que no lo he escrito yo..

Gràcies reina...

El Código Da Vinci: Un castillo de naipes derrumbado

¿Quién está engañando a quién?

El Código Da Vinci es sin duda una novela muy emocionante. Está llena de acción y códigos inesperados que atrapan al lector desde sus primeras páginas. Pero lo que más ha captado nuestra atención es la pregunta que suscita: ¿Ha estado la civilización occidental engañada durante 2000 años por una gigante operación que intenta encubrir a la iglesia?
El Código Da Vinci trata temas tan importantes como la religión, el poder, el feminismo, la historia y la verdad. Investigar este tipo de temas es algo muy positivo. No obstante, una novela de intriga que está llena de sugerencias no documentadas y está basada en fuentes inventadas no es de utilidad para aquellos que quieren una información fiable. Como prefacio a la novela, leemos una introducción donde se asegura que la teoría y las afi rmaciones que aparecen en el libro están basadas en una investigación realizada por historiadores conocidos. Por tanto, El Código Da Vinci se hace pasar por una novela histórica, cuando no lo es. De hecho, sería difícil encontrar a un historiador serio (sea cristiano, agnóstico o ateo) dispuesto a verifi car las construcciones y teorías históricas de El Código Da Vinci. Dan Brown tiene una imaginación muy viva y escribe libros muy emocionantes. Pero como guía de la historia mundial occidental y de la historia de la iglesia, no es fi able. Este artículo explicará por qué.

As = ¿Priorato de Sión?

La historia que aparece en El Código Da Vinci está construida en torno a la organización secreta del Priorato de Sión, y los documentos que supuestamente esconde este Priorato.
“El Priorato de Sión – sociedad secreta europea fundada en 1099 – es una organización real”. (Afi rmación que aparece en la sección “Los hechos”, que precede a la novela).
Lo cierto es que las afi rmaciones que el libro hace en cuanto al Priorato de Sión no son más que fi cción. El Priorato no existió hasta que el francés Pierre Plantard la estableció como organización en 1956. Él inventó toda la historia del Priorato. En la década de 1960 Plantard intentó crear un mito sobre sí mismo como el Gran Maestre de un Priorato que él mismo había inventado. Elaboró documentos falsos y, de hecho, engañó a los autores de Holy Blood, Holy Grail [Sangre santa, Santo Grial], el libro en el que Dan Brown encontró
muchas de las teorías que luego usó en El Código Da Vinci. El fraude de Plantard salió a la
luz en la década de 1980. Cuando la policía lo interrogó bajo juramento en 1993, admitió que era un engaño.
En www.priory-of-sion.com encontrará información seria sobre Pierre Plantard y sobre su imaginario Priorato de Sión.

¿Documentos secretos?

“En 1975, en la Biblioteca Nacional de París se descubrieron unos pergaminos conocidos como Les Dossiers Secrets, en los que se identifi caba a numerosos miembros del Priorato de Sión, entre los que destacaban Isaac Newton, Sandro Boticelli, Victor Hugo y Leonardo da Vinci”. (Afi rmación que aparece en la sección “Los hechos”, que precede a la novela).
La verdad es ésta: Pierre Plantard y unos amigos suyos elaboraron una serie de pergaminos conocidos como Les Dossiers Secrets. Esos documentos falsos fueron depositados en los archivos de la biblioteca. Pero el engaño salió a la luz, y Plantard confesó el fraude.

El castillo de naipes se desmorona

Cuando te das cuenta de que el Priorato de Sión es un producto de la imaginación de Plantard, y que Les Dossiers Secrets eran unos documentos falsos realizados en la década de 1960, las alegaciones históricas que aparecen en El Código Da Vinci se desmoronan como un castillo de naipes.
Leonardo da Vinci nunca fue el líder del Priorato de Sión, simplemente porque ese Priorato nunca existió. Por tanto, es imposible que supiera de unos documentos secretos que narraban la historia de Jesús y María Magdalena.
Las afi rmaciones que El Código Da Vinci hace sobre el Santo Grial, cofres enormes que guardan documentos de los tiempos de Jesús, códigos secretos que aparecen en los cuadros de Da Vinci, etcétera, no son más que pura fantasía y fi cción. Como elementos creativos de una novela de fi cción, esas afi rmaciones tienen mucho mérito; pero como información histórica, no tienen ningún valor.

Rey = ¿Jesús?

“El hecho de que Jesús pasara a considerarse “el Hijo de Dios” se propuso y se votó en el Concilio de Nicea … Hasta ese momento de la historia, Jesús era, para sus seguidores, un profeta mortal … un hombre grande y poderoso, pero un hombre, un ser mortal” (Capítulo 55, p. 290)
Éstas y otras afi rmaciones que aparecen en El Código Da Vinci se contradicen claramente con los hechos históricos. A Jesús se le adoraba como Hijo de Dios desde el principio de la historia de la iglesia. Hay muchos documentos y miles de citas de los siglos anteriores a
Constantino que así lo prueban. La alegación de que hasta el Concilio de Nicea (325 dC.) los cristianos vieron a Jesús como un hombre normal, es un fraude histórico, pues no se corresponde con la información histórica.
El Código Da Vinci dice que Constantino encargó y financió la redacción de una nueva Biblia. “Los evangelios anteriores fueron prohibidos y quemados” (Capítulo 55, p. 291). Falso de nuevo, como muchos datos que aparecen en la novela. Constantino no tuvo nada que ver con el debate sobre cuál debía ser el contenido de la Biblia, y nunca realizó una revisión. De hecho, existe un buen número de manuscritos de Biblias en griego que fechan de dos siglos antes de Constantino. La Biblia que tenemos ahora es la traducción (aunque hay diversas traducciones) de esos manuscritos, y no el producto de revisiones imaginarias como la inventada por Dan Brown.
El Código Da Vinci dice que los evangelios gnósticos (el evangelio de María, de Felipe, etcétera) son más fiables que los cuatro evangelios que aparecen en la Biblia. Esta afirmación no se puede respaldar desde los hechos históricos. Casi todos los especialistas están de acuerdo en que los evangelios de la Biblia fueron escritos cuando aún vivía gente de la generación de Jesús. Sin embargo, los evangelios gnósticos se escribieron entre 100-200 años después de la muerte de Jesús. Casi todo lo que aparece en El Código Da Vinci sobre los evangelios gnósticos es información errónea. Según la novela, “esos documentos hablan del ministerio de Cristo en términos muy humanos” (Capítulo 55, p. 292). ¡Todo lo contrario!
Los evangelios gnósticos contienen, en su mayor parte, conversaciones entre Jesús y los discípulos después de la resurrección y antes de la ascensión; consecuentemente, hablan de un Jesús muy divino. Estos evangelios casi no contienen nada sobre el ministerio de Jesús.
Los evangelios gnósticos lo presentan como un maestro divino e inalcanzable, lejano a la realidad de la vida cotidiana de las personas. Los cuatro evangelios de la Biblia son los únicos en los que encontramos a un Jesús humano que actúa, come, llora, se enfada y se cansa y se preocupa por los débiles y los rechazados.
Los evangelios de la Biblia son los únicos en los que encontramos a la vez a un hombre digno de confi anza y a un Salvador misericordioso.

Reina = ¿María Magdalena?

“Jesús fue el primer feminista. Pretendía que el futuro de su Iglesia estuviera en manos de María Magdalena” (Capítulo 58, p.308).
Los personajes principales de El Código Da Vinci afi rman lo siguiente: 1. El plan de Jesús era casarse con María Magdalena y tener hijos con ella. 2. Jesús nombró a María Magdalena como la líder de la Iglesia y como una diosa. 3. Ella sería el icono de la “divinidad femenina” en la adoración y la teología cristiana. 4. El acto sexual era un elemento central de la enseñanza de Jesús. “La unión física con la mujer era el único medio a través del cual el varón podía llegar a la plenitud espiritual y alcanzar (…) el conocimiento de lo divino” (Capítulo 74, p. 383; ver también los capítulos 28 y 60).
Según El Código Da Vinci, Jesús no fue capaz de organizar su secta basada en el sexo antes de que lo crucifi caran. María Magdalena, embarazada, tuvo que huir a Francia. Allí nació la niña Sara, y sus descendientes más adelante se casarían con la familia real francesa.
Según El Código Da Vinci, el Priorato de Sión es el guardián de miles de documentos secretos. Esos documentos prueban los verdaderos planes de Jesús, y el rol de María Magdalena como líder de la Iglesia y como diosa. La Iglesia ha escondido todos estos secretos sobre María Magdalena durante 2000 años. Algún día esos documentos saldrán a la luz.
Todo esto es una teoría muy creativa y muy adecuada para una novela de fi cción. No obstante, como descripción de la realidad histórica, no tiene ningún sentido. No hay evidencias históricas ni ninguna fuente que respalde la información que aparece en esta novela. Pura especulación; producto de la imaginación. Y, como se ha dicho antes, ni siquiera existe ese Priorato de Sión que se supone que debía ser el guardián de esos secretos…

J = ¿Leonardo Da Vinci?

Leonardo Da Vinci aceptó “cientos de lucrativos encargos del Vaticano” e “incorporaba símbolos ocultos que no tenían nada que ver con el cristianismo” (Capítulo 8, p. 64 y 65).
Mucha de la información que aparece en El Código Da Vinci sobre Leonardo da Vinci no tiene ninguna base histórica. Da Vinci solo trabajó en un encargo del Vaticano, no en “cientos” de ellos como dice la novela. Y Leonardo no era un rebelde contra la iglesia y sus creencias.
Por ejemplo, El Código Da Vinci dice que Leonardo le puso el nombre a la Mona Lisa basándose en los nombres de dos dioses egipcios. Es evidente que eso no es cierto, pues la famosa pintura recibió ese nombre 31 años después de la muerte del pintor.
Puesto que el Priorato de Sión no existía, Leonardo da Vinci no tenía conocimiento de los supuestos secretos de los que Dan Brown habla. Los códigos y símbolos que Dan Brown encuentra en el arte de Leonardo son, por tanto, fruto de una interpretación imaginativa que no tiene ninguna base. ¿No es ingenuo creer que un novelista tiene más conocimiento sobre el arte de Leonardo Da Vinci que todos los especialistas en arte?
Un ejemplo de ello lo tenemos en el análisis que Dan Brown hace de la obra “La Última Cena”. El autor asegura que el personaje que está a la derecha de Jesús es una mujer. Durante 500 años todo el mundo ha sabido que se trata de Juan, el más joven de los discípulos.
En días de Leonardo Da Vinci era muy común representar a los hombres jóvenes con rasgos
femeninos. Esta costumbre es característica de todo el Renacimiento. Y, ¿dónde está Juan si
ese personaje es realmente María Magdalena?
Por diferentes razones, solo puede haber una conclusión: Dan Brown está equivocado porque
la persona que está sentada a la derecha de Jesús no es María Magdalena.
El Código Da Vinci es una novela de intriga inusualmente creativa. Pero no es más que eso.
Las teorías y las especulaciones que hay en el libro no se convierten en realidad solo porque ocurren dentro de edifi cios históricos. Los que interpretan esas especulaciones como verdades históricas están construyendo su comprensión de la civilización occidental y de la historia cristiana sobre leyendas, falsifi caciones y fuentes ilusorias.
El noruego Oskar Skarsaune es un reconocido profesor de Historia de la Iglesia y un experto en las teorías y en la historia que hay detrás de El Código Da Vinci. Después de publicar un libro sobre la novela, en una entrevista una periodista le preguntó si la mayoría de las referencias históricas que Dan Brown incluye en la novela eran erróneas. Su respuesta fue la siguiente: “Lo diré de una forma aún más contundente: Ninguna de las afirmaciones que Dan Brown hace en relación con la Historia de los inicios de la Iglesia y con la Historia Medieval es cierta. Ninguna.
Documentación, Citas extraídas de la traducción castellana de El Código Da Vinci, Dan Brown, de Ediciones Umbriel, 2003.

¿Quieres más información o una documentación más completa?
Este texto no tiene copyright. Así pues, se puede reproducir, traducir y distribuir libremente. Está escrito por Björn Are Davidsen y Öivind Benestad, Benestad@bigfoot.com. Davidsen es autor del libro Da Vinci Decoded.

lunes, junio 05, 2006

Ponzoña

Dicen que tienes ponzoña en la mirada, que el que te mira jamás regresa de ese eterno viaje a la locura, que tus ojos lindos raptan el alma, lo transporta a otra dimensión, otros mundos paralelos, paraisos perdidos sin direcciones fisicas asignadas, sin saber cómo llegar y sin saber cómo salir tampoco.
Tu sonrisa rosa roja es un complemento ideal a tu mirada, deslizarse por el labio hasta caer a tus pies es como un viaje de ida y vuelta sin haber partido jamás, de cualquier rincón aparece dulce y cándida, inmaculada, y te deja danzando en los anillos mágicos cual ratoncito inquieto en laboratorio de ensayos.
Dicen que tienes ponzoña en la mirada, que si se mira fijamente tus pupilas se puede ver los pobres desalmados corriendo sin cesar a modo de rueda que jamás deja de rodar, jamás cesa la inercia de dar vueltas.
Y me miras y sonries, yo sé que piensas, yo fui tu creador: te tallé a golpe de besos, te pulí a base de sufrimientos,finalmente, te otorgué la vida y la muerte a traición, plantando un nido en cualquier cornisa, saltando de casa en casa, dando tumbos de farola en farola...
Me miras y sonries, yo sé que piensas, me quieres ahí rodando, entre tus anillos, recorriendo caminos miles, desesperando a cada carrera, pasando por un túnel oscuro sin fin. Ya no sonries y me tienes de frente, jamás floreciste en mi acera, no puedes hacerme volar ni quitarme el alma.

¿Sabes por qué? Porque una vez estuve muerto y volví, hice un pacto invisible que me condenaba a bailar sin tregua, vendí mi alma a la sociedad consumista y me recetaron pastillas que jamás tomé a cambio...

Y volveré mil veces más a caer, y mil veces más me levantaré, sin alma, sin prisa...
Anda y sé buena, vuelve a dibujar una vez más tu linda sonrisa.

viernes, junio 02, 2006

Derivas I

"y aunque tu no lo sepas, te inventaba conmigo..." , me dejaron el mensaje en el aire, suspendido sin remedio, y daba vueltas yo al edificio, caminaba la manzana que lo forma sin motivo aparente, intentaba discernir entre dos mundos, mi mundo y el mundo real, ¿dudar? Pse, quizás si dudo en exceso, pero curioso es que mientras dudo hago las cosas que tengo en mente, seguro de mi mismo pero dudando de las dudas y dudando del que duda.
Me siento en la terraza de un bar, me pido un gin tonic y enciendo un cigarrillo, dejo que el humo fluya por adentro mío, después resbala torpe por mi nariz, cierro los ojos y divago, vislumbro entre tinieblas la larga colección de dudas e ideas tormentosas, quizás grandes ideas, pero son ese tipo de pensamientos que me tormentan que no los dejas salir a pasear porque sabes que ya no volverán y serán de otro habiendolo parido tu.
Yo sé que ella no es la más guapa de todas las chicas, pero es más guapa que cualquier otra, necesito dormir, necesito descansar, a veces me siento tan viejo y solo, como si el resto del planeta estuviera tan lejano, inalcanzable, sientiendo que por mucho que les hable ellos no comprenden y que por mucho que me hablen no les escucho.

Tranquilidad y buenos alimentos, conozco el remedio pero por curiosa paradoja, me siento victima y me siento arma homicida.

Voy a dormir pero no soñar, seguro que en unas horas todo será diferente, fue un día algo raro, me pareció eterno pero corto...

Tiempo y espacio, espacio y tiempo...